¡Llegó el segundo bebé!

¿Ahora sumas dos? Reorganiza tu tiempo y comparte tu amor.

Si cuando tuviste a tu primer bebé hubo momentos en los que sentías que estabas al borde de un ataque de nervios; ahora, con la llegada de un nuevo bebé, habrá que hacerle frente al mundo de emociones y sensaciones para ser una súper mamá.

Atender a tu primer bebé quizá haya sido una tarea más fácil en comparación con la dedicación y el tiempo que exigen atender adecuadamente a dos niños.

Así que, tómalo con calma. Con dos niños las tareas se multiplican y por ende
, cuentas con menos tiempo para hacerlas. Respira profundo y piensa que esta situación, aunque pareciera ser complicada, es sumamente gratificante.

Las ventajas:

A pesar de las dificultades de los primeros meses, apreciarás lo gratificante que es tener otro bebé y te emocionarás mucho cuando veas juntos a tus dos hijos.

Con el paso del tiempo notarás cómo la relación entre ellos mejora y llegará el momento en que ambos jueguen juntos más seguido y tú podrás relajarte un poco.

Podrás observar y descubrir que tus hijos tienen su propio lenguaje y comparten juegos de los cuales no formas parte.

Además, ahora obtendrás algunas respuestas que
por ser madre primeriza desconocías. Criaste un primer hijo, sabes cómo cuidarlo, alimentarlo y establecer límites.

Los consejos:

Aprende a manejar tu tiempo. En esta etapa de tu vida el tiempo será una preocupación constante y por eso debes organizarte. Cuando sólo tienes un hijo puedes vivir sin necesidad de tener un estricto cronograma para lavar y realizar otras labores en casa, como preparar la cena.

Sin embargo, con dos, aprovechar y organizar el tiempo es fundamental ¿Cómo puedes lograrlo? Abastécete de pañales para que no tengas que salir a comprar a cada rato, ten algunos regalos en casa para cuando los necesites, establece un calendario para las labores del hogar como lavar y planchar, implementa rutinas con tus hijos, acostumbra al nuevo bebé a una siesta regular y a un horario para dormir.

Ponle atención a tus relaciones. El nuevo miembro de la familia te exige tiempo y energía. Ahora asumes el reto de tener que aprender a dividir tu atención y a brindar tu energía y amor a los dos.

Eso implica que, a veces, debas consentir a tu hijo menor mientras el mayor no ve, o leerle a éste mientras alimentas al bebé (la verdad no es tan difícil como suena). Los expertos también recomiendan dedicarle un tiempo especial al niño mayor, lejos del recién nacido y por fuera de la casa si es posible.

Este cambio de vida también afecta la relación con tu pareja. Ambos pueden sentirse estresados debido a que pasan poco tiempo juntos a solas. Tu pareja puede llegar a sentir que tienes besos y abrazos de sobra para los niños pero no para él.

Por eso, es muy importante que recuerdes que a medida que la familia crece necesitan la ayuda del otro y la clave para lograrlo es la comunicación. Si le expresas a tu esposo que requieres de su ayuda, él te apoyará; pero si callas, nunca lo sabrá y en cambio te sentirás muy frustrada.

Las recomendaciones para alcanzar el equilibrio:

Date el tiempo suficiente para conocer a tu nuevo bebé. Lo más probable es que no sea un clon de su hermano mayor, por lo que debes tener la mente abierta y comprender que cada niño tiene un temperamento diferente.

Planea una cita nocturna semanal con tu esposo para que pasen tiempo juntos, lejos del hogar y de los niños, o permanece en casa y deja de hacer lo que estés haciendo cuando los niños se duerman para ponerte al día con tu pareja.

Establece una rutina. Divide tu jornada, si tienes una actividad matutina en el día, pasa la tarde en casa, o viceversa. Con un horario establecido tus hijos sabrán qué esperar y tendrán algo para hacer cada día.

Arréglate. Aunque sea tentador estar en sudadera todo el día, ten en cuenta que estar bien presentada te hará sentir bien, con mayor control y a gusto.

Fuente:http://www.expotuboda.com.mx/articulosBebesyninos.asp?catID=220&categoriaID=262&articuloID=1094